La escucha activa te ayuda a mejorar tus relaciones con el entorno

por | Oct 20, 2022 | habilidades sociales

Imagino que conoces la definición de la palabra escuchar. Posiblemente la has nombrado infinidad de veces durante un día completo y lo más seguro es que hayas pensado que escuchas perfectamente a quien te habla. Y para completar la reflexión inicial, en algún momento del día habrás podido pensar que alguien a tu alrededor no te escucha, o al menos del modo en que tú deseas que te escuche.

Si es así, no te preocupes, formamos parte de un porcentaje de población que no sabe escuchar activamente y/o no se siente escuchado de verdad.

Quizás algunas personas piensan que escuchan: “Yo escucho, yo oigo”. Imagino que en algún momento alguien te ha increpado exclamando que no le has escuchado, que no le has atendido como esperaba. Si esta situación ya la has vivido, entenderás de lo que te estoy hablando.

Hoy hablamos de la escucha activa cómo nos ayuda a tener mejores relaciones con el entorno. Así mismo, mencionamos su uso en terapia gestalt.

¿Qué es la escucha activa?

La Real Academia Española define escuchar como: “prestar atención a lo que se oye” y, en una segunda acepción, escuchar es “dar oídos, atender a un aviso, consejo o sugerencia”.

Esta definición nos demuestra que la escucha implica un ejercicio consciente de atención y apertura hacia el otro. No cabe duda de que entendemos la escucha en muchas ocasiones como un modo de atención hacia nuestro interlocutor o grupo, así, sin más,  pero la escucha activa va mucho más allá.

La escucha activa se define como una escucha y entendimiento de la comunicación desde el punto de vista del otro.

Podemos escuchar el contenido de sus palabras y entenderlas perfectamente, habla nuestro mismo idioma y el mensaje es perfectamente lógico y en el volumen adecuado. No obstante, en ocasiones algo falla y no llegamos a entender activamente lo que nos quiere transmitir. No llega a nosotros de la manera en que el emisor quiere transmitir y vivimos esa situación a veces incómoda en la que la persona piensa: “no me siento escuchado”.

En algunas ocasiones nos cuesta acompañar  la dirección de nuestra mirada hacia la persona que nos habla, tratando de observar las señales del cuerpo, su posición, la expresión de su cara, las posturas. El lenguaje no verbal también es comunicación, y de hecho nos dice más que las palabras. Las ideas que hacemos llegar a los demás a veces son una prolongación de lo que el cuerpo transmite. Por ejemplo, y hablando de gestualidad, podemos mostrarnos pasivos o distantes, interesados o entusiasmados,  según cómo enfoquemos la mirada mientras nos están hablando.

En este momento podemos entender que la escucha activa va mucho más allá de lo que nos está  “contando”. Lo que escuchamos quizás pueda ser solo una mínima parte de lo que esperan que entendamos, o una mínima parte de lo que nos quieren decir.

Entendiendo lo que es la escucha activa, desde nuestro espacio de terapia Gestalt en Alcalá de Henares te animamos a que hagas este ejercicio práctico:

Puedes colocarte frente a tu interlocutor, mirarle a los ojos, atender en el preciso momento en el que te habla a los movimientos de su cuerpo, a la posición y a los gestos o expresiones que acompañan  su mensaje.

Practica la escucha activa y dirige también tu cuerpo, tus gestos o expresiones hacia tu interlocutor claramente. Intenta darte cuenta de lo que tú comunicación no verbal está expresando: cuál es tu postura, qué gestos haces y cómo los haces, qué movimientos acompañan la expresión. Por pequeños que sean, algo quieren decir.

Trata de evitar una conversación simultánea o utilizar cualquier dispositivo que pueda distraerte en el momento en el que la otra persona te está hablando.

Este tipo de presencia en cualquier conversación pueden realmente llegar a demostrar a la otra persona que le estás escuchando con atención. Es un trabajo simultáneo porque aquí entra también  juego otra gran palabra, la empatía. La empatía se define como la capacidad de identificarse con alguien y compartir sus sentimientos. Está muy relacionada con una escucha activa efectiva y es realmente necesaria para llegar a entender a tu interlocutor. Podemos aumentar nuestra capacidad de identificación con nuestro interlocutor y compartir sus sentimientos.

La escucha activa en la Terapia Gestalt implica apertura, atención consciente en el momento presente y, como te digo, una gran dosis de empatía. En definitiva poder estar con lo que te está pasando a ti y también poder reconocer al otro.

un hombre en actitud de escucha activa

La escucha activa potencia nuestras relaciones interpersonales

Un gran porcentaje de los fracasos en nuestras relaciones con las personas que nos rodean radica en la forma de escuchar, de atender a lo que nos cuentan.

Es importante aprender y entrenar una escucha activa para poder relacionarnos mejor con nuestro entorno, sin juicio, lejos de las valoraciones o interpretaciones constantes de lo que nos cuentan.

En algunas ocasiones, cuando alguien nos cuenta un problema o una situación que ha vivido tendemos a explicar, a recetar o dar consejos demasiado rápido, sin tener en cuenta que quizás solo quiere compartir sus sensaciones.

Perdemos entonces nuestra capacidad sobre la escucha activa por una prisa inminente de contar nuestra opinión, emitir nuestra valoración, a veces incluso podemos llegar a estar más atentos al discurso que queremos exponer que a escuchar activamente lo que me están contando.

Cuando nos sucede esto, estamos viendo el mundo solo con nuestros ojos, no nos damos cuenta de que los ojos de la persona que está contando su problema puede implicar algo más importante. Está esperando que la escuches, de forma activa, de forma sencilla.

Tendemos a pensar que lo que la receta que me funciona a mí, le funcionará a la otra persona. Y en muchas ocasiones no es así. Es una persona diferente, con vivencias distintas y con otra experiencia vital. A veces damos por hecho que eso es lo que necesita: nuestro consejo, nuestra opinión, dejando de lado lo que realmente estaba tratando de contarnos.

Estar presente es importante en la escucha activa y en Terapia Gestalt

En Terapia Gestalt Alcalá somos conscientes de que este es un problema más importante de lo que parece. Por ello trabajamos para propiciar un encuentro wn el que creamos una relación donde la terapeuta, con su presencia, mantiene una escucha que va más hayá de la mera apreciación de lo que el paciente va contando: se produce también una escucha emocional que permite a la persona desarrollar la confianza imprescindible  para el trabajo terapeútico.

Debemos recordar que estar presentes y emplear la escucha activa supone:

  • Estar presente con uno mismo y conocer cuál es mi estado para escuchar a la otra persona.
  • Estar presente para el otro, lo que significa que su testimonio desde su vivencia es único. Sin emitir juicios ni valoraciones. Es su historia, no la mía.
  • Cuando eres consciente de todo lo que sucede en la conversación puedes comenzar a sentir.

Puedes incluso observar qué efectos tiene en ti tener en cuenta estos elementos. Poner en práctica la escucha activa permite reconocerse en el otro y sentirse reconocido es completar la escucha real. De este modo, dejamos espacio para encontrarnos y nutrirnos.

Si necesitas el acompañamiento terapeútico para mejorar tus habilidades de escucha activa, contacta con nosotros. En Terapia Gestalt Alcala estamos presentes, para ti.